“Es una historia que ocurrió hace 70 años y sigue siendo vigente hoy”, afirma Sebastián Feldman, productor del documental Suerte de Pinos, en una entrevista reciente con GPS Audiovisual. La película, dirigida por Lorena Muñoz, se proyectó en el BAFICI 2025 y ha recibido una fuerte repercusión por su potencia narrativa y su compromiso con la memoria histórica.
El film narra el viaje de la directora a Salduero, un pequeño pueblo del norte de España, donde en 1954 su bisabuela y su tía abuela fueron asesinadas a plena luz del día. El caso fue silenciado durante décadas, y el documental busca desenterrar esa verdad, enfrentando pactos de silencio y la incomodidad de quienes aún hoy prefieren no hablar.

Una producción con raíces familiares e impacto político
En la entrevista, Feldman destacó que el proyecto fue posible gracias a un proceso de investigación de años y al compromiso de un equipo sensible al enfoque de Muñoz. “Suerte de Pinos es un documental íntimo pero también colectivo, porque habla de los silencios familiares, del peso de la historia y de las heridas que aún están abiertas”, explicó el productor.
La película no solo recupera una memoria personal, sino que pone en discusión el rol de la justicia, la memoria colectiva y la violencia de género desde una mirada crítica al legado del franquismo y su persistencia cultural.
Reconocimiento en festivales
La recepción de Suerte de Pinos en el Festival de Málaga y el BAFICI fue tan positiva que la película obtuvo el Premio de la Subcomisión de Género de DAC a Mejor Película, compartido con La Virgen de la Tosquera, de Laura Casabé.
"Estamos muy orgullosos de formar parte de esta historia", concluye Feldman. "Porque creemos que el cine también sirve para reparar y abrir preguntas".
Fuente: GPS Audiovisual